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Aokigahara; la meca de los suicidas.

Seas de los que creen en las historias de fantasmas o bien seas del grupo de quienes no creen, estoy segura que luego de leer este posteo algo se va a revolver en tu interior, y es que la historia de Aokigahara es tan interesante como tenebrosa. ¿Pueden imaginar un lugar en el mundo cuyo único objetivo de ser sea que las personas puedan ir a quitarse la vida? Lo sé, suena extraído de una película de terror. Pero de hecho este lugar existe y se encuentra en Japón y de él vamos a hablar en el día de hoy.
Aokigahara es un lugar único en el mundo, en el hay tantos árboles que ellos evitan que el viento pueda llegar a sus entrañas, por ende en el lugar el silencio es casi absoluto (a excepción claro de sonidos humanos), de hecho por algún motivo aún desconocido tampoco se pueden encontrar animales, no hay aves, ciervos e incluso insectos. Es como si de alguna manera al ingresar uno se pudiera adentrar en el limbo entre la vida y la muerte. Sumado al extraño paisaje el bosque entero se encuentra sobre yacimientos de hierro, lo cual impide que las brújulas logren funcionar correctamente haciendo que una vez que uno se pierde en su interior sea muy difícil salir, a menos que se este en compañía de un guía. Por el mismo motivo es común que tampoco los teléfonos móviles tengan señal, de modo que una vez dentro de ese mar de árboles es muy complicado volver si no se tiene conocimiento alguno del lugar.
En lo personal lo nombrado más arriba es motivo suficiente para explicar el porque la gente elige este lugar para incurrir en el suicidio, básicamente lo que les ofrece el bosque es un espacio tranquilo y seguro donde culminar con sus vidas. Dada su geografía es casi imposible que los encuentren a tiempo y los puedan salvar, así que no hay mayor misterio sobre el porque la gente lo escoge para realizar este acto.
Sin embargo en mi investigación decidí ir más allá, porque claramente hay leyendas e historias en torno a tan peculiar lugar, así que voy a adentrarme en los condimentos sobrenaturales que la cultura nipona decidió darle al bosque.

1) Su ubicación:
Aokigahara esta a los pies del monte Fuji, el cual es sagrado para los japoneses. Dicho monte representa la unión del mundo de los vivos con el plano espiritual al mismo tiempo que simboliza el conducto entre nuestro mundo y el interior del planeta. Para los nipones este es un lugar sagrado, al cual le otorgan un gran poder y misticismo.
2) Su origen:
El bosque se formo en condiciones muy especiales; dado que esta asentado sobre las cenizas de la lava expulsada por el Fuji entre los años 800 y 1083. Ya por este motivo y por el tema de su ubicación muchas personas consideran este espacio como un purgatorio para yureis y yokais, los fantasmas de los que perdieron la vida de manera trágica y que, supuestamente, son quienes evitan que los que se adentran en el bosque salgan. 
3) El folklore creado en torno al bosque: 
El Aokigahara comenzó a granjearse su fama durante el siglo XIX, cuando las hambrunas provocaron que muchos padres abandonasen a niños y ancianos en el bosque. No obstante, la fascinación moderna por el bosque se remonta a 1960, cuando Seicho Matsumoto publicó una de sus novelas más célebres, 'Nami no Tou', en la que sus protagonistas acababan con sus vidas en el bosque, cual Romeo y Julieta japoneses. Sin pretenderlo, generó un efecto llamada que provocó que muchas personas se desplazasen hasta el bosque para acabar con sus vidas, aunque ya hacía tiempo que Aokigahara se había convertido en el lugar preferido por los suicidas.
Finalmente fue la llegada de la película americana 'El bosque de los suicidios' (The Forest en su lenguaje original) en el año 2006 lo que elevaría la fama del lugar a tal punto que fueron varios los youtubers que viajaron sólo para sumarse a la fiebre y el morbo que genero el lugar. 
Algo que llama poderosamente la atención de aquellas personas que sólo desean conocer los misterios que se adentran en Aokigahara es el hecho de que a lo largo y ancho de todo el bosque se pueden observar pequeños vestigios de existencia humana: frascos de pastillas, retazos de ropa, sogas colgando de las ramas de los árboles, pequeñas cintas de colores que adornan los senderos por donde los suicidas encuentran el final, y sobre todo, pequeños altares a los pies de los árboles que recuerdan el macabro objetivo de algunas de las personas que deciden acudir allí. 
También es sumamente común que los senderos estén acompañados de carteles que invitan a que uno reflexione sobre su vida, claramente el objetivo de estos es disuadir a los suicidas y lograr que decidan darle una oportunidad más a sus vidas. Estos carteles ofrecen también números de asistencia psicológica
Los carteles, sin embargo, tienen un éxito muy bajo dado que todos los años se rescatan entre 50 y 100 cadáveres del bosque. Se sabe que estas son sólo cifras estimativas, pues el terreno es tan grande que muy a pesar de los grupos de búsqueda que se organizan cada año y el incansable trabajo de los cuidadores del bosque, hay cuerpos que no se hallaran jamás. De hecho recientemente estalló un escándalo con cierto muchacho famoso que vagando por el lugar se encontró el cuerpo de un hombre ahorcado y no tuvo mejor idea que subir dicho metraje a su cuenta de YouTube para obtener más visitas. El hallazgo de cuerpos es algo con lo que los visitantes que decidan recorrer las partes más oscuras del bosque deberán lidiar, es algo casi inevitable, y sobre todo un hecho que uno acepta al decidir hacer caso omiso a las múltiples y extensas advertencias que acompañan todo el predio. 
Sin embargo, y pese a todo lo que les conté en este blog, no puedo evitar incluir este hermoso lugar como un futuro destino para ir a acampar. ¿Qué decirles? Así de rara soy.